jueves, 6 de agosto de 2015

De la imposibilidad de patear una lata
Por Pedro Suárez


Era un trozo de metal abandonado a su destino de chatarra, y sin embargo brillaba como el que sonríe frente a la ruleta; intenté darle una patada pero me faltó cadera, luego descubrí que no tenia fémur para tomar el impulso, que el pie era un adorno, un lugar para aparcar zapatos, que la  tibia y el peroné eran un lindo pero indiferente matrimonio; descubrí que no había lata, y así.
@pedrojsuarez 

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